Como se ha explicado anteriormente, una instalación frigorífica está basada en los cambios a que se es sometido un fluido, mediante los cuales es capaz de enfriar un recinto o cámara.

Clasificación y tipos:

Los tipos de condensadores más corrientes, según la forma de disipación del calor y del medio utilizado son:

    • Condensador por aire: Los condensadores enfriados por aire son banco de tubos (simples o aletados), encerrados dentro de un armario metálico, con rejillas para el ingreso de aire, las que regulan el caudal de aire y su dirección, de modo que lo atraviesen en flujo cruzado
       

       

       

       

       

    • Condensador por agua: también llamadas multitubulares, en los que el calor sensible es transferido por agua. Esta agua puede ser recuperada y reciclada y recirculada al condensador después de ser enfriada mediante cesión de calor sensible y latente en una torre de enfriamiento. Los condensadores enfriados por agua son intercambiadores de calor del tipo tubos concéntricos, del tipo carcasa y serpentín o del tipo carcasa y tubos (Shell & tubes).

      En estos últimos el agua circula por dentro de tubos (dos o cuatro pasos) mientras que el vapor condensa en el exterior de los tubos.

      Una variante actual de estos intercambiadores son los intercambiadores de placas. Generalmente van asociados a una torre de enfriamiento, que retira el calor del agua del condensador para que esta pueda ser reutilizada.

 

  • Condensadores evaporativos: Es una combinación de condensador y torre de enfriamiento. Los tubos por donde circula el gas refrigerante condensado son mojados por una lluvia de agua, con aire circulando en contracorriente. El agua se calienta hasta la temperatura del bulbo húmedo del aire. El aire sale del condensador por la parte superior.

    Cuando el gasto de agua sea un factor importante, por su escasez o por su costo, pueden emplearse este tipo de condensadores.

El propósito del condensador termodinámico es provocar el cambio de estado del vapor a la salida de la turbina para así obtener máxima eficiencia e igualmente obtener el vapor condensado en forma de agua pura de regreso al tren de generación de vapor.

Las razones para condensar vapor son tres:

  • Se aprovecha el vapor a la salida de la turbina, cerrando el ciclo del agua.
  • Se reduce la presión a la salida, incluso por debajo de la atmosférica, con lo que el salto de presión es mayor y por lo tanto el rendimiento y la potencia de la turbina aumentan.
  • El posterior aumento de presión del fluido puede realizarse en una bomba hidráulica, con un consumo enérgico menor que si se realiza en una caldera o en un compresor.